Belén estaba lleno de forasteros que habían acudido a la ciudad a empadronarse y por encontrase María en muy avanzado
estado de gestación, buscaron por los alrededores un lugar donde refugiarse del frío y del aguanieve que caía esa noche y encontraron un establo abandonado y midio derruído y se refugiaron y se
refugiaron en él y allí fue donde tuvo lugar el suceso más grande de todos los siglos, el nacimiento de Jesús, el hijo de Dios.